El Estadio Nacional de Brasilia, que sigue los patrones de una de las ciudades arquitectónicamente más modernas del país, será uno de los recintos más imponentes y el segundo más grande (con un aforo de 70.042 espectadores) de la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™.
El antiguo estadio Mané Garrincha, prácticamente demolido, dejará sitio a una cancha que dispondrá de una nueva fachada, con un techo de estructura metálica, nuevas gradas y un césped rebajado para permitir una visión completa del juego. Con un proyecto de edificación ecológico, centrado en la ausencia de emisiones de carbono, el reciclaje y el acceso total por medio del transporte público, servirá para consolidar el nombre de la capital como referencia mundial en planificación sostenible, lo que constituirá un legado importante para otros sectores de la economía local.
Superficie: Hierba