Ni puesto a propósito habría coincidido mejor. El primer entrenamiento del Real Madrid bajo las órdenes de Zinedine Zidane se ha llevado a cabo esta mañana coincidiendo con el tradicional día de puertas abiertas del club blanco en la previa de Reyes. Es decir, los aficionados madridistas han tenido entrada libre al campo Alfredo Di Stéfano para presenciar la primera sesión preparatoria de su nuevo entrenador.
Y han sido muchos los que han querido dar su respaldo al francés en su estreno, rozando el lleno en el primer campo de la Ciudad Deportiva del club. Unas seis mil personas se acercaron a Valdebebas para presenciar en directo el acontecimiento y ver de cerca a sus ídolos.
Pudieron verlos a todos excepto a Gareth Bale, que no saltó al césped por unas molestias musculares. Sí trabajaron a la máxima intensidad el resto de sus compañeros, así como los futbolistas del filial Odegaard, Mayoral y Llorente, a los que Zidane conoce bien, ya que han estado bajo su mando hasta ahora.