El derbi de la Preferente Norte Gallega entre Chantada y Lemos disputado ayer pasará a la historia. Y no será por ninguna goleada ni tanto espectacular, si no por su suspensión y, especialmente, por lo inaudito del motivo: Un helicóptero averiado en el centro del campo.
El encuentro comenzó con normalidad hasta que, pasado el cuarto de hora de juego, un jugador del conjunto local comenzó a sentirse mal. Salió del campo y fue atendido en la banda, pero los médicos temían que pudiera tratarse de un problema cardíaco serio y decidieron llamar a urgencias. Entonces, se desplazó el helicóptero de 061 para evacuar al futbolista.
Tras tomar tierra en el centro del campo e introducir al paciente en el helicóptero, este no pudo volver a despegar por una avería. El futbolista, que ya está totalmente recuperado, fue entonces evacuado en ambulancia. Pasaron los minutos y no pudieron solucionar los problemas de la aeronave, por lo que el partido tuvo que ser suspendido.