El fútbol chino está de moda y el que aún no lo sepa se dará cuenta pronto. El dinero no es un impedimento para llevar allí a algunos de los mejores futbolistas del mundo y ahora que se ha abierto la veda, parece que el efecto dominó será inmediato.
En el país asiático llevan tiempo haciendo movimientos como los de llevar a Cannavaro o Scolari a los banquillos o incorporar a jugadores como Robinho, Ramires o Rondón… todos ello a cuentagotas y tratando de dar con la tecla que le permita dar un impulso a su fútbol, por el que sienten devoción.
Pero la ofensiva potente se está fraguando. El fichaje de Jackson Martínez ha marcado un antes y un después en la forma de ver desde occidente al fútbol chino. El hecho de fichar al delantero fichado como estrella por un Atlético de Madrid, que es candidato al título de Liga y Champions, supone una importante declaración de intenciones. 42 millones no han sido un impedimento para que el Guangzhou Evergrande se hiciera con el colombiano y desatara la caja de los truenos.
El siguiente en llegar a china podría ser Álex Teixeira, futbolista del Shakhtar Donetsk. El delantero brasileño lleva 26 goles en 26 partidos y el Jiangsu Suning ya ha ofrecido 50 millones de euros. Las maletas ya están preparadas.
El que no se irá, al menos de momento, es Hulk, delantero estrella del Zenit de San Petesburgo. La oferta es mareante, ya que el Shanghai Senhua entregaría 91 millones de euros a los rusos para quedarse al potente delantero. Sin embargo, parece que en Rusia no necesitan demasiado ese dinero y no van a desprenderse de Hulk. ¿Habrá nuevas embestidas?
