Ayer se hizo público el acuerdo al que llegó la liga por vender sus derechos televisivos por 2.650 millones. Movistar plus abonará 750 millones por el “partidazo de la jornada” y Mediapro con los otros ocho (hay uno en abierto por ley) por otros 1.900 millones. Ese será el reparto vigente durante los tres próximos años.
Y los clubes, ¿cómo se reparten los ingresos? Pues como era de esperar, no equitativamente. Los grandes han aflojado un poco y le permiten al resto coger un poquito más de pastel, pero poco más. La media de lo que debería recibir cada club ronda los 50 millones por temporada. Pues bien, solo cuatro equipos están por encima. El resto, por debajo o muy por debajo.
Se llevan la palma, como no puede ser de otra manera, el Barcelona y el Real Madrid. Cada uno ingresarán 140 millones, con lo que podrán seguir engordando sus arcas y acometiendo fichajes imposibles para el resto. Cerca de 67 se queda el Atlético de Madrid, bastante por delante de los 62 del Valencia. Parece claro quiénes tienen la obligación de clasificarse para la Champions.
Y según esa teoría deberían ir a la Europa League el Sevilla (49) y el Athletic (48) aunque el Villarreal también cuenta con unos ingresos importantes (45). Al Málaga, siguiente en esa lista, le vendrán muy bien los 42 que le corresponden, dada su delicada situación económica.
En la zona media, entre 30 y 40 millones, se encuentran Real Sociedad (40), Espanyol (36), Levante (35), Celta (33), Getafe (33), Rayo (32), Granada (30) y Deportivo (30).
Según esta lógica, luchar por la permanencia debería ser cosa del equipo más modesto de la Liga, el Eibar (27), junto con los tres recién ascendidos Betis (28), Sporting (26) y Las Palmas (25).